02 mayo 2007

Sant Sadurní d'Anoia

Tras 13 meses de lucha, Mercadona y los compañeros cenetistas de Sant Sadurní d'Anoia han llegado a un acuerdo. Tras 13 meses, en que los cenetistas mostraron el coraje y temple que solo posee la gente combativa, no es que tuvieran que ceder, sino que el cansancio acumulado por tantas concentraciones, manifestaciones... y la falta de colaboración de aquellos por los que, además de por sí mismos, luchaban... sin contar con las dificultades económicas inherentes a estas batallas... los ha forzado a un acuerdo que, por lo que sabemos, no recoge aquello que inició el combate.
Muchos años de lucha nos han enseñado que no todo se logra al lanzarse a una huelga. Hay que tener una salida o, como en el caso de Sant Sadurní d'Anoia, la valentía suficiente para convertir la huelga laboral en una de hambre. Así y todo, existe una diferencia entre los cenetistas --que todos viven de un salario pues en la CNT no hay liberados; y, en caso de batalla, de unas cajas de resistencia que nunca recaudan lo que se necesita-- y los esbirros que llevan a cabo el trabajo sucio de los patronos cuando no lo hacen ellos mismos. La subvención con que pagan los trabajos mafiosos los patronos deja pequeño, por no decir ínfimo, cualquier salario o caja de resistencia.
A nosotros nos sorprende, y sabemos que a muchos otros también, que tras cualquier batalla --incluso de mayor duración que ésta, si fuera posible-- surjan siempre gentes descontentas con la solución de la misma. Bueno, contentos no estamos ninguno, ¡ojalá se hubiese conseguido la reivindicación perseguida! Pero esas gentes a quienes nos referimos, que normalmente son aquellos que ni se atreven a rechistar ante los abusos de su jefe, aunque también son los que, a escondidas, más incitan a rebelarse a los trabajadores decididos, destilan su veneno como si ellos, al menos, fuesen capaces --y sabemos que no-- de luchar como aquellos a quienes critican.
No vamos a hacer un análisis de los errores y aciertos que, a nuestro entender, se cometieron. Eso le corresponde a la CNT, y estamos seguros de que serán acertadas sus conclusiones; y también estamos seguros de que la próxima vez no durará tanto la huelga, porque antes se habrá ganado.
Lo que los compañeros cenetistas de Sant Sadurní d'Anoia nos han dado, con su valentía y empuje, ha sido una lección que nadie debe desaprovechar: hasta los gigantes son vulnerables cuando se les ataca con denuedo.
(Para comentarios: anarquizante@gmail.com )