15 noviembre 2006

El llamado Proceso de Paz en el País Vasco

El 29 de junio pasado, Rodríguez Zapatero anunció el inicio del diálogo con ETA, a fin de acordar con ésta el abandono de las armas y su disolución. No es el primer Gobierno que tiene conversaciones con ETA; UCD, el PSOE de Felipe González... y el PP... lo hicieron. Por tanto, no hablamos de nada nuevo. Lo que sí es nuevo es la situación única que hay actualmente para llegar a un acuerdo. Y eso pese a los horrendos Pacto Antiterrorista, acordado por PP y PSOE en el 2000, Ley de Partidos, aprobada en 2002, y el cajón de sastre que es el delito de "apología del terrorismo"; y pese (esto hay que recalcarlo) a la política obstruccionista del PP actual, con la complicidad, entre otros, de los reaccionarios del PSOE.
Pero no vamos a hablar de lo que es archiconocido. Íbamos, en principio, a intentar aclarar, dentro de lo posible, las verdaderas razones de una de las partes en conflicto: los nacionalistas, independentistas o no. Aunque ello no será necesario si mencionamos los siguientes hechos, ampliándolos a todas las nacionalidades y regiones pues abarcan a toda España:
1º) Mezclan, sobre todo los independentistas, el indiscutible derecho a conservar el carácter y cultura de cada pueblo, y el también indiscutible derecho a autoorganizarse, es decir, a autodeterminarse, con el sustituir un estado grande por otros pequeños; o dicho de otra forma, por subestados, que, por lógica, tendrán las mismas ansias opresoras del grande. Y lo justifican con unos derechos reconocidos por diferentes Gobiernos en regímenes diferentes, en base a una herencia aristocrática o, cuando menos, burguesa de épocas ya finitas.
2º) Todos, y decimos todos, los partidos nacionalistas, aunque lo niegan hipócritamente, son, en realidad, entes pequeñoburgueses o capitalistas en el más amplio sentido de la palabra. Si no, veamos quiénes son la mayoría de los afiliados al PNV, a CIU e, incluso, a Ezquerra Republicana, por nombrar a los más significados, sino capitalistas reconocidos. En cuanto a Batasuna o al BNG, entre otros, son simplemente aprendices de pequeñoburgueses. Y para demostrar lo último, y como para muestra basta un botón, Anxo Quintana, principal dirigente del BNG, habla siempre de formar una clase empresarial gallega.
Terminamos, creemos que ya hemos puesto las bases para un debate. Ya sabéis, los comentarios al correo electrónico anarquizante@gmail.com ; todos los que estén relacionados con el tema los publicaremos integros, junto a nuestra contestación, en este blog.